Los conductores y repartidores trabajan a través de sus celulares y las empresas de apps los consideran contratistas, sin derecho a todos los beneficios y protecciones.
El Financiero
Uber Technologies está en conversaciones con el Gobierno mexicano sobre formas de contribuir al sistema de seguridad social en nombre de sus contratistas sin designarlos empleados de pleno derecho.
“Estas conversaciones deben basarse en tratar de preservar la flexibilidad del trabajo independiente, reconociendo al mismo tiempo que este tipo de trabajo debe mejorar”, dijo Andrew Macdonald, vicepresidente sénior de movilidad de Uber.
Los comentarios se produjeron después de que la secretaria del Trabajo, Luisa María Alcalde, dijera que México está evaluando cómo regular las condiciones de los trabajadores de la economía colaborativa, conocida como “gig”. El país está trabajando con el Instituto Mexicano del Seguro Social y las autoridades de Ciudad de México en un plan, señaló el 19 de agosto.
Los conductores, repartidores y otros de la economía colaborativa normalmente trabajan a través de sus teléfonos inteligentes y las empresas de aplicaciones los consideran contratistas, sin derecho a todos los beneficios y protecciones de las que gozan los empleados de tiempo completo. Las empresas dicen que este acuerdo significa que los trabajadores pueden ser sus propios jefes y aceptar trabajos a su conveniencia.
“La conversación que queremos tener con el Gobierno es, ¿qué beneficios podemos tener? ¿cómo podemos ayudar a apoyar el sistema de seguridad social y, al mismo tiempo, preservar un modelo que funcione para los contratistas y los usuarios?”, dijo Macdonald en una entrevista el lunes.
La compañía está estudiando varias formas de hacerlo, señaló, como por ejemplo mediante contribuciones al seguro social de cada trabajador o por viaje. “Hay muchas formas de hacer que esto funcione”, dijo.
Los contratistas de aplicaciones de todo el mundo han presionado para obtener más protecciones, lo que ha llevado a Uber en el Reino Unido a reconocer a los conductores como trabajadores, una categoría intermedia que les da derecho a un salario mínimo y a un número limitado de otros beneficios. En España, el Ministerio de Trabajo se comprometió a dar a los trabajadores de la economía colaborativa acceso al sistema de seguridad social.
Uber también quiere expandir su negocio en el sureste de México, señaló Macdonald, y ya lanzó Uber Taxi en Oaxaca y planean comenzar a operar pronto en Chiapas.