El Zumbido del Moscardón: Los «otros datos», por Alejandro Leyva Aguilar

Dice una voz popular “adulación en boca propia, es vituperio” y el presidente es un auto adulador consumado. Se presume honesto y reza a los cuatro vientos “no somos iguales”, “ya no hay privilegios”, “ya no hay moches” y ha de ser muy difícil verse frente al espejo cada mañana y darse cuenta que su discurso es, igual que la figura reflejada, una farsa.


Le descubrieron entrega de dinero de procedencia no identificada a sus hermanos, tráfico de influencias con su sobrina y los contratos en Pemex; conflicto de intereses de su hijo José Ramón en al menos dos empresas gringas, una de origen mexicano y lo que aún falta que los ciudadanos sepamos sobre la injerencia de sus hijos en su gobierno.


Y todo esto es ya vox populi, por eso la aceptación del “presidente”, así en minúsculas y entre comillas, cayó por debajo del 50 por ciento, su peor calificación en tres años desastrosos de gobierno sin rumbo.


Ayer justamente la Auditoría Superior de la Federación (ASF) que encabeza por ciento un paisano Oaxaqueño, David Colmenares Páramo, dio a conocer que la Cuenta Pública 2020, presenta anomalías por ¡60 MIL MILLONES DE PESOS!, poco más del doble del presupuesto que ejerce anualmente la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y por lo menos 10 mil millones están en las obras insignia del “pinche presidentito”, parafraseando a Brozo.


El informe de la ASF la dependencia, detectó “posibles” actos de corrupción y daños al erario por más de 10 mil millones pesos en las tres obras insignia de la cuatroté: el tren maya, el aeropuerto Felipe Ángeles y la refinería de dos bocas.


También detectó posibles actos constitutivos de delito en los programas prioritarios como Sembrando Vida, Pensión para Adultos Mayores, Jóvenes Construyendo el Futuro y apoyos al campo, entre muchos otros.


La Cuenta Pública 2020 la ASF detectó pagos indebidos en la construcción del tren maya y de la refinería de dos bocas, así como un montón de irregularidades en la construcción del aeropuerto de Santa Lucía, mientras que en los programas sociales detectó el pago a personas que no están inscritas en los programas e incluso pago a personas que ya han fallecido ¿no que eran diferentes?


Los apoyos al campo se quedaron en promesa porque, a pesar de que se pagaron los insumos, las bodegas de segalmex, no tienen producto, eso es el resultado de 866 auditorías que realizó el equipo del oaxaqueño David Colmenares Páramo para desnudar la deshonestidad de los servidores públicos y del ejército mexicano que son los responsables de ejercer los recursos públicos.


Del tren maya destacan 267 millones, 882 mil pesos cuyo destino no está claro y principalmente de intereses financieros, debido al pago anticipado de trabajos correspondientes al tramo 4 que va de Itzamal a Cancún, así como trabajos “pagados pero no realizados” en el tramo 1 que va de Palenque a Escárcega.


En el mismo tren maya la ASF observó que ingeniería básica y el Fondo de Fomento al Turismo  (FONATUR), autorizaron pagos indebidos por un monto de 38 millones 792 mil pesos por “la correcta integración de los precios unitarios del contrato, ya que en las matrices de estos, se contemplaron tiempos superiores del personal considerado en la mano de obra, con respecto a los tiempos establecidos en los programas de trabajo de la propuesta económica”.


En dos bocas la cosa está igual, ahí el monto observado es por 59.2 millones de pesos por inconsistencias entre los volúmenes estimados contra los realmente ejecutados, pagos indebidos en las categorías de profesionistas “senior y junior” sin acreditar especialidad, pagos excesivos en el concepto de desmonte de zona de selva y, claro adjudicación e invitaciones restringidas de contratos en perjuicio de la celebración de concursos abiertos.


El aeropuertito del presidentito no canta mal las rancheras, aquí la ASF emitió diversas recomendaciones y promociones de responsabilidad a autoridades de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) por no haber reportado egresos por 20 mil 243 millones de pesos del fideicomiso público, por haber gastado más de 12 mil millones en la compra bajo capítulos de gasto que no correspondían y por no haber registrado contablemente el valor real o estimado de las donaciones recibidas.


Así el cochinero de la administración pública en las obras prioritarias del gobierno de la cuatroté, los responsables tiene 30 días a partir de hoy para solventar pero ¿usted cree que lo harán?, espero que mi paisano sea lo suficientemente valiente como para no dejarse amedrentar y ponga las denuncias correspondientes para deslindar responsabilidades.


Mientras, la economía -ya lo dijo el INEGI también ayer- se contrajo -1%, otra vez volvimos a caer, LO QUE NUNCA PASÓ CON LOS GOBIERNOS DEL PRIAN.


Mañana le toca el turno a los programas sociales del “presidentito”.


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