Opinión: «¿Morena Airlines» por Bruno Donatello

La verdadera razón, no confesada por el diputado García, es que se requiere de mecanismos forzosos para hacer operativo y atractivo el uso del AIFA.

EL ECONOMISTA

Estimado lector(a): de requerir transportación aérea, ¿adquirirá su boleto para volar por Aerovías Morena o Morena Airlines? La respuesta altamente probable es que preferiría viajar por cualquier otra línea aérea más confiable y con prestigio en el mercado. Y esa sería la respuesta previsible, sobre todo si el viajero fuera obligado a utilizar el nuevo aeropuerto en la terminal militar de Santa Lucía, rebautizado como AIFA.

El tema de una nueva aerolínea estatal operada por la Secretaría de la Defensa viene a cuento por la propuesta lanzada por el diputado por el partido Morena, Omar Enrique García, para crear una nueva línea aérea estatal. Con todo respeto: ¿Qué experiencia tienen los militares para operar una línea aérea comercial? La verdad desnuda es que absolutamente ninguna, y ese posible experimento estaría marcado de entrada por la improvisación y, claramente, también por la falta de responsabilidad.

Las razones alegadas para crear la nueva línea aérea militar son las de aumentar los destinos de viaje, incrementar la oferta y ofrecer tarifas más bajas. De manera inmediata se manifiesta la contradicción entre la primera y la tercera de las razones invocadas, lo que no habla muy bien de la capacidad analítica del diputado García. Las nuevas rutas que se pudieran abrir serían de pocos pasajeros, con costos unitarios más altos. ¿Cómo podrían entonces reducirse las tarifas para el pasaje? La respuesta única imaginable, es que ¡mediante una operación en números rojos, que pese como fardo sobre las ya muy apretadas finanzas públicas!

La verdadera razón, no confesada por el diputado García, es que se requiere de mecanismos forzosos para hacer operativo y atractivo el uso del AIFA. Pero no pienso que el establecimiento de una línea aérea militar sea la solución para ese problema. De hecho, incluso dudo que el AIFA tenga una solución operativa de mercado. Los pasajeros no tienen deseos de usarlo por lejano e impráctico. Y tampoco las aerolíneas, a las cuales se les ha tenido que retorcer el brazo por vía de las autoridades para que, a regañadientes, operen en esa terminal, claramente

Y es evidente el nudo gordiano en el que están atrapadas las autoridades aeronáuticas del México actual. El problema más serio que enfrentan es la rebaja de categoría mundial para el sistema aeroportuario mexicano. Y la principal razón para esa reducción de categoría es el propio AIFA, cuyo espacio aéreo se traslapa con el del AICM.

PUBLICADO en https://www.eleconomista.com.mx/opinion/Morena-Airlines-20221020-0009.html

bdonatello@eleconomista.com.m

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