Maribel Ramírez Coronel / EL ECONOMISTA
México fue muy ágil en dar la autorización para las prometedoras pastillas antiCovid. Pero una cosa es que sean autorizadas y otra, lo más difícil, es que ya lleguen. Para el caso, que se compren. Y ahí es donde estamos.
El regulador sanitario mexicano las aprobó unos días después de Estados Unidos. El regulador sanitario FDA las aprobó como regalo de Navidad: el 22 de diciembre la opción de Pfizer (Paxlovid) y la de MSD (Molnupiravir) al siguiente día.
La Cofepris aquí aprobó primero la de MSD, el 7 de enero, y una semana después la de Pfizer. La expectativa por ambos antivirales es enorme: son tomados por 5 días, previenen la hospitalización y, junto con la vacunación y medidas de protección, serán un parteaguas como tercer arma para acabar más rápido con Covid19.
El punto aquí es que, al igual que las vacunas, son expresamente para uso de emergencia, y los gobiernos tienen control absoluto del medicamento. Los países en los que molnupiravir está aprobado son: EUA, Reino Unido, Dinamarca, Israel, India, Italia, Japón, Francia, Bolivia, Panamá y México.
Aquí la gran incógnita es cuándo llegará. Estando en pleno pico de Covid19, se esperaría que hubiera prisa por tenerlo para evitar hospitalizaciones y fallecimientos. Pero quizá como no han subido tanto las hospitalizaciones las autoridades no sienten la presión. El riesgo es que si no nos apuramos, la demanda mundial se elevará y quedemos otra vez al final de la fila.
El presidente López Obrador generó aún más expectativa cuando anunció que México ya había ordenado la compra.
Platicamos con el director médico de virología en MSD, el doctor Javier Báez-Villaseñor, y nos dice que no hay aún conversaciones ni señales de cuándo iniciarán. Que en MSD están listísimos, ya bien colocados en la línea de salida, y calculan que a partir de que se definan cantidades tardarán de 3 a 4 semanas en traer el producto. El balón está en la cancha del Gobierno.
Aquí la duda es, si verdaderamente está tomada la decisión de comprar dichas pastillas anticovid, cuánto dinero prevé el equipo hacendario de Rogelio Ramírez de la O para adquirirlas. El precio indudablemente será el principal factor. Estados Unidos adquirió 3.1 millones de dosis de molnupiravir por valor de 2,200 millones de dólares (a 700 dólares aproximadamente por tratamiento), pero MSD dice que para México como país de desarrollo medio corresponde un precio respaldado. Estas negociaciones se hacen en función del nivel de desarrollo humano de cada nación establecido por el Banco Mundial.
Hasta ahora MSD ha celebrado acuerdos anticipados de compra y suministro de molnupiravir con gobiernos de más de 30 países, incluidos Australia, Canadá, Corea, Japón, Tailandia, Reino Unido y Estados Unidos. Y sólo en los últimos 2 casos ya se está distribuyendo. El caso de Reino Unido es interesante porque fue el primero que se anticipó a comprarlo desde inicios de noviembre -compró 2.23 millones de tratamientos- y para definir quiénes lo reciben es bajo un estudio clínico llamado Panoramic (https://www.panoramictrial.org), patrocinado por la Universidad de Oxford y financiado por el Instituto Nacional de Investigación en Salud. En Estados Unidos se está repartiendo selectivamente a través de farmacias privadas de igual manera que las vacunas, siempre controlado por el Gobierno.
Es de esperarse que México ya esté analizando el mecanismo de acceso y el tipo de triage para seleccionar a los pacientes.
No podemos dejar de mencionar que hay un mercado negro de monulpiravir proveniente de India, que consiguió licencia para producir el genérico estando en pleno pico de Delta. Cofepris emitió alerta sanitaria, pero entre médicos se sabe cómo conseguirlo. El problema es que al entrar de contrabando no hay trazabilidad ni seguridad alguna de que funcione ni alguien que responda en caso de problema o efectos adversos serios. Y entre más tarde en llegar el original, se siga extendiendo el antiviral ilegal.
Convenio TecSalud con CMH
Una señal positiva enviaron el Sistema de Salud del Tecnológico de Monterrey (TecSalud) y el Consorcio Mexicano de Hospitales (CMH) con su convenio de colaboración para fortalecer la atención hospitalaria a nivel nacional. Se centrarán en tres ámbitos: educativo, servicios hospitalarios y políticas públicas. Por lo pronto arrancarán con un programa en Gestión de Sistemas de Salud para directivos y gerentes del sector salud. Lo interesantes es que no será sólo para instituciones privadas sino también públicas.
Es un convenio de ganar-ganar porque a TecSalud le permitirá llegar a las 47 ciudades en las que el Consorcio tiene presencia con 52 hospitales asociados. Y por su parte, el CMH tendría el respaldo de servicios de alta especialidad, así como acceso a la tecnología médica de vanguardia que provee TecSalud. Pero lo más significativo, como dijo el doctor Guillermo Torre en el evento de presentación, es la disposición de aportar para fortalecer todo el sistema -público y privado- y que ante los enormes retos se van abriendo voluntades para ver cómo incidir en favor de la salud pública.
Incan quiere desaparecer programa Micaela.
Es sabido que el cáncer cervicouterino (CaCu) en México está notoriamente centrado en mujeres en situación vulnerable, con escasos recursos y bajo nivel educativo. Por ello se conformó hace años el Programa llamado “Micaela” centrado en brindar atención integral, individualizada y protocolizada a esas pacientes logrando resultados tangibles. Por eso no se entiende que el Instituto Nacional de Cancerología (InCan), dirigido por el doctor Abelardo Meneses, quiera desaparecerlo. Y más inexplicable si dicho programa tiene un sustento presupuestal de 39.4 millones de pesos aprobado en el PEF 2022. O acaso ¿alguien se querría atrever a desviar esos recursos asignados para las mujeres para dirigirlos hacia otros fines?
Publicado en https://www.eleconomista.com.mx/opinion/Pastillas-anticovid-autorizadas-no-hay-para-cuando-lleguen-20220126-0002.html