- El Estado ha mantenido la tasa de prevalencia de esta enfermedad infecciosa crónica de menos un caso por cada diez mil habitantes
- A pesar de la pandemia por COVID-19, se llevan a cabo acciones de prevención, promoción y seguimiento a casos en la entidad
Villa de Tututepec de Melchor Ocampo, Oax., 02 de septiembre de 2021.-Durante los últimos 15 años, Oaxaca ha cumplido con los objetivos establecidos por la Organización Panamericana de la Salud (OPS), de mantener la tasa de prevalencia de la lepra menor a uno por cada 10 mil habitantes; el propósito es, que para el 2030, esta enfermedad sea erradicada en la entidad.
Ello lo destacó el Jefe de la Unidad de Medicina Preventiva de los SSO, Vladimir Eliel Hernández Sosa, al poner en marcha en representación del Secretario de Salud del Estado, Juan Carlos Márquez Heine, la Jornada Dermatológica de búsqueda intencionada de casos de lepra en la Costa del 31 de agosto al 3 de septiembre.
Mencionó que la incidencia de esta patología en Oaxaca es baja, pues tan solo en el 2020 fueron diagnosticadas seis personas, mientras que en lo que va del 2021, son tres los casos detectados.
Por lo anterior, ha dejado de constituir un problema de salud pública y son varios los factores que explican este descenso, como por ejemplo, un mejor diagnóstico y tratamiento farmacológico más efectivo.
Explicó que la lepra, es una enfermedad infecciosa crónica transmitida por el Mycobacterium leprae, que se caracteriza principalmente por causar lesiones en la piel y en los nervios periféricos, “cuando nosotros sospechamos que una persona la tiene, es por la presencia de manchas blancas en la dermis, que muchas veces están resecas, y cuando esto evoluciona se pueden tener alteraciones en la sensibilidad, es decir, los pacientes no sienten el calor”, indicó.
El profesional de la medicina mencionó, además, que otros signos de alerta, son la presencia de nódulos en la piel o úlceras, sobre todo, en personas que viven, en zonas geográficas donde anteriormente se han detectado casos.
Hernández Sosa abundó que la enfermedad es de transmisión lenta, de nueve hasta 20 años, mientras que, el período de incubación es de un promedio de cinco años y se contagia de persona a persona, principalmente, cuando se convive de cerca con quien ya tiene esta patología, como es el caso de familiares.
El funcionario estatal refirió que, aún con la pandemia por COVID-19, los SSO mantienen activas en las localidades las acciones de promoción, difusión, visitas domiciliarias, revisión clínica dermatológica, toma de muestras de baciloscopia–siempre y cuando se encuentren lesiones sugestivas de la enfermedad–.
Así como la muestra de una porción de la piel mediante una biopsia. Ambas pruebas, son remitidas al Laboratorio Estatal de Salud Pública de Oaxaca (LESPO) donde se procesan para establecer o descartar el diagnóstico; si el resultado es positivo se incorpora a tratamiento a la persona, el cual es gratuito, dura de seis meses hasta un año, y se encuentra disponible en los SSO.
Puntualizó que, aunque a través de las jornadas de detección que se realizan durante el año el personal que acude a las comunidades realiza el diagnóstico y seguimiento de los casos, en todas las Unidades del Primer Nivel de Atención a la Salud de esta institución, las y los profesionales de la rama médica están capacitados para hacer el diagnóstico diferencial y brindar el tratamiento adecuado.
Destacó que esta importante acción, se lleva a cabo con la participación del personal de salud de las Jurisdicciones Sanitarias del Istmo y Costa.